Medidas generales
Las medidas generales/terapia médica se dirigirán a mejorar la sintomatología
Ejercicio físico aeróbico de forma regular para mejorar la movilidad, potenciar la fuerza muscular y controlar el peso, controlar la obesidad mejora sustancialmente la afectación de las articulaciones de carga.
Medidas físicas: uso de férulas para mantener la articulación en reposo, bastones para disminuir la sobrecarga de la articulación, zapatos específicos para mejorar el apoyo y absorber los impactos. Uso de frío (en agudo) y calor (en crónico).
Modificación de las actividades físicas repetitivas que sobrecarguen la articulación e higiene postural. Alteración de la disposición de muebles y ayudas técnicas en el domicilio.
Uso de analgésicos/antiinflamatorios orales: son medicamentos que no modificarán el curso de la enfermedad pero actúan sobre el dolor, la inflamación y la rigidez articular. No provocan tolerancia ni síndrome de abstinencia con su supresión. Una de sus afectaciones habituales es la irritación del estómago que pueden provocar; para ello se recomienda su ingestión con fármacos protectores o el uso de la nueva generación de antiinflamatorios (inhibidores de la cox-2) con menor efecto gastrolesivo. Se ha de tener siempre presente que la respuesta de cada paciente a los medicamentos será variable.
Uso de medicación tópica: existen analgésicos y antiinflamatorios que se administran sobre la piel, con un efecto superficial.
Viscosuplementación oral: el condroitín sulfato, la diacereína y el sulfato de glucosamina son productos que podrían actuar como nutrientes del cartílago a medio o largo plazo. Su efecto es controvertido en el ámbito científico.
Analgesia intraarticular: son inyecciones que se realizan en la articulación de cortisona (potente antiinflamatorio) junto a anestésico local, que tendrán como objetivo la disminución del dolor y la mejora de la movilidad.
Viscosuplementación intraarticular: El ácido hialurónico es una sustancia viscosa que fabrica la membrana sinovial de la articulación, y que es componente básico del líquido sinovial; tiene como objetivo lubrificar las superficies cartilaginosas y protegerlas de los golpes por sus propiedades viscoelásticas. En la artrosis el líquido sinovial pierde concentración de ácido hialurónico, lo que hace al cartílago más débil ante las fuerzas de fricción y compresión. Las infiltraciones se realizan en la consulta en máxima condición de antisepsia.